Mientras que buscamos sentirnos bien gran parte del tiempo, a través de nuestro esfuerzo y compromiso, nuestra psique está atada a apegos negativos que producen infelicidad. Las decisiones inconscientes que tomamos que producen infelicidad están ligados a experiencias que en la infancia produjeron sentimientos de privación, rehúso, traición, humillación, abandonó, y rechazo. Esto desafía el sentido común, pero nuestro inconsciente opera de forma irracional. Entonces, no sabemos qué es lo que realmente nos ocurre, le echamos la culpa a la situación, pero en realidad, estamos buscando la EMOCIÓN, utilizando la situación para detonar emociones que nos desempoderan.